SALTA (Especial-EL SOL ABC). Y muchos dicen que el efecto dominó ha comenzado en todas las cadenas de supermercados, porque los últimos informes desde la Cámara de Comercio de Salta dicen que el comercio de alimentos ha caído por sobre el 50 % en las últimas semanas.
Ello se ve reflejado en la información que viene de la central de una de las cadenas mayoristas de la ciudad, como es Diarco, que en “Lanús cerró una de sus sucursales, con el despido de sus casi 30 trabajadores y lo mismo está sucediendo en la sucursal de Berazategui”, como lo informó el diario Página 12 ayer.
La caída en las ventas, donde estas cadenas se dedican a proveer de mercadería para la gran cantidad de almacenes y mercaditos minoristas en los barrios de la ciudad y ciudades como localidades del interior de la provincia de Salta, es tan abrupta, que como un efecto contagio otras como Makro y Yaguar están también con problemas, que ya han comenzado con los despidos o notificaciones preventivas para vacaciones adelantadas o suspensiones preventivas para ver si la crisis comienza a caer.
Los analistas de las consultoras locales dicen que “es casi imposible dentro del corto plazo revertir esta situación de crisis, cuando los servicios siguen subiendo, la inflación se mantiene alta y la situación macroeconómica está desbocada, aunque su caballito de batalla siga siendo que ‘está bajando la inflación’, pero no habla de que no sirve este dato porque la gente no tiene dinero para gastar. Y el consumo se genera cuando las familias tienen ingresos para gastar. Todo es una cadena y eso se ve reflejado en las grandes cadenas mayoristas, porque los pequeños comerciantes son los que se encargan de ir a comprar a estos grandes negocios para proveerse a buenos precios”, aseguran.
Otros están en la situación de “aguante” para no cerrar y ver que la situación cambie. Pero el desempleo sigue in crescendo en esta ciudad y lo mismo ocurre en el interior de la provincia, donde la mayoría emigra a la capital para ver si puede zafar.
