BUENOS AIRES (Especial-EL SOL ABC). Muchos de nosotros, como parte del público consumidor hemos comenzado a tomar conciencia, que si nos unimos vamos a conseguir mejores resultados y la inflación será un tema recurrente, pero con menor incidencia en los bolsillos del pueblo trabajador. Así lo expresa la gente en las redes sociales.
“Con la llegada de los celulares, una de sus pocas virtudes, es que en el momento podemos sacar fotos de los productos de Precios Cuidados y compararlos con los que ofrece el supermercado de cercanía y si cumple en la presentación con la medida ordenada por el Gobierno nacional, para hacerlas conocer en las páginas de las redes sociales y para que todos tenga noción de calidad y precios, para de esta forma ayudar que las políticas antiinflacionarias se consoliden”, dicen en las redes sociales millones de usuarios, pero son pocos los que realizan esta actividad de control personal sobre los precios.
Algunos han detectado que varios supermercados “esconden mercadería o no ponen toda, pero sí pegan comunicados al lado del producto: ‘este producto se encuentra sin stock, por falta de entrega de proveedor’, o en sí dicen la verdad, por lo que habría que poner más inspectores en la calle”, expresan otros en páginas de Facebook.
Desde el Interior
También se han detectado por los reclamos del público usuario, que varias ciudades importantes del interior del país, sin contar sus capitales, no existen los controles ni los “Precios Cuidados”, porque el Estado nacional adolece de oficinas de Control de Precios en el interior, que dependan de la Secretaría de Comercio Interior de la Nación, que es uno de los pedidos que más se hacen.
Allí se han detectado también que algunos supermercadistas engañan a sus clientes, con “falsos precios y nombres de productos”. Por ejemplo, ponen “Leche en sachet, 1 litro, $ 69”, pero cuando va a la caja paga “no sólo por la leche, ya que lleva otros diez productos, resulta que cuando hace el control se da con que la leche cuesta $ 99. Y cuando uno hace el reclamo, luego de la revisión en góndola del precio: ‘Perdone, ese precio era de una leche que ya se vendió y nos olvidamos de sacar ese precio. Es de otra marca, como usted puede ver’. O también que el precio de góndola no se corresponde con lo que tickea caja”.
Ahora se debe controlar el peso o volumen exactos que dice el envase de cada producto. En todo momento le quieren robar al cliente.
