ROSARIO, Santa Fe (Especial-EL SOL ABC). Todo cae por su propio peso. Los que se creían “vivos de viveza extrema, como los Padoán Vicentín, que currando al Estado nacional y provincial y haciendo todo lo que hicieron con la empresa agroindustrial, iban a salir indemnes les salió el tiro por la culata”, expresaron medios locales luego de la medida dispuesta por el Poder Ejecutivo de la Nación, en el marco de miles de reclamos de productores pequeños y medianos que “fueron estafados por la firma Vicentín, que ahora estaba con pedido de quiebra, porque no se les había pagado la entrega de miles de toneladas de soja o trigo, que se hicieron en los depósitos de la firma aludida en los puertos de Rosario y San Lorenzo. A los que hay que sumar otros proveedores de Vicentín, que también reclaman sus pagos”. La expropiación decretada por el Gobierno nacional fue por la gran cantidad de demandas y pedidos, entre ellos los del gobernador santafesino Omar Perotti, que “solicitaron una medida rápida y efectiva para paliar los reclamos”.
Presentación y conferencia
Ayer a las 18.30 horas, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, junto a la senadora Anabel Fernández Sagasti (Mendoza), el ministro de la Producción Matías Kulfas y el recientemente nombrado interventor de la firma Vicentín, el ingeniero agrónomo y consultor económico agropecuario, Gabriel Delgado, ex secretario de Agricultura en el segundo mandato de la Dra. Cristina Kirchner, se dio a conocer el decreto de expropiación contra uno de los grupos económicos que mayor dinero fugó fruto de estafar al Banco Nación, gracias al dedo autorizante de su ex presidente González Fraga, otro delincuente de cuello blanco.
El presidente Fernández adujo la “necesidad de lograr la soberanía alimentaria, para que la medida sea estratégica para el país”, que nace, dijo, de una “idea de la senadora Fernández Sagasti, quien ya venía trabajando en un proyecto en ese sentido”.
De acuerdo a datos surgidos de distintas consultoras, con esta medida el Gobierno se asegura “poder pasar a tallar en la conformación de precios de los alimentos en la Argentina, porque Vicentín estaba organizada para participar en varios rubros de la cadena alimenticia argentina: harinas, pastas, granos, leche, miel, aceites, carnes y vinos”.
Desde el diario económico Ámbito se expresó que “Fernández recordó que se trata de una empresa líder en el mercado agropecuario y sostuvo que ‘el propósito es que continúe y trabajadores tengan continuidad’, como así también que ‘alrededor de 2.600 productores puedan seguir contando con empresa a la que venderle lo que producen’.
El Presidente remarcó que “todos los empleados continuarán en sus puestos”. Se trata de una empresa que tiene 1.300 puestos de trabajo directos y a ello se le debe sumar otro tanto de puestos de trabajo indirecto.
El proyecto de ley de expropiación propondrá que el Estado se haga cargo de todo activo del Grupo Vicentín que se conformará en un fondo fiduciario cuya gestión será encomendada a YPF Agro, “una empresa líder de capitales mixtos”, precisó el primer mandatario.
El jefe de Estado, enfatizó que “queremos rescatar (a Vicentín) en favor de la economía argentina” y particularmente para “mercado de granos y cereales que es un activo muy importante por todo lo que se exporta”.
Pero por sobre todo, el Presidente remarcó que luego de la pandemia la producción de alimentos será de “suma importancia”.
También señaló que el rescate de una empresa de esta magnitud era un reclamo tanto de los productores como del Gobierno de la Provincia de Santa Fe (donde concentra sus actividades).
Uno de los roles fundamentales que le confiere el Gobierno a esta estatización es que es “muy importante tener una empresa testigo en el mercado de granos como YPF (en el caso de combustibles) que pueda dar señales, pero nada más que eso”, aseveró el jefe de Estado.
Una historia non sancta
La historia de los Padoán Vicentín no es de una familia que “sea muy religiosa y muy santa”, todo lo ganado en Santa Fe es fruto a “extorsiones, aprietes y una fenomenal guarida de ladrones que formó con contadores y abogados para evadir y fugar divisas a paraísos fiscales, cuestión que la llevó al éxtasis durante el régimen macrista”. Hoy que la Justicia está detrás de ellos, se “esgrimen pobres, sin plata, dignos de lástima”. Pero producto de la actuación de estos ladrones millones de argentinos entraron a la línea de pobreza, porque el Estado se desfinanció y empezó a “endeudarse” en una trama perfectamente aplicada por Mauricio Macri y Marcos Peña.
Alberto Padoán Vicentín sabía ufanarse en las reuniones en Rosario, “mi trato con Macri es de par a par; tengo mucha confianza. Tenemos el mismo proyecto personal y es parte de la Argentina que viene”. Menos mal que sus pronósticos no se cumplieron, y viendo la hecatombe del régimen macrista, “salió desesperado a chorear todo lo que encontraba a su paso”, dijeron en el entorno de los trabajadores de sus firmas. Para ello lo llamó a González Fraga, su otro amigo dentro del gobierno macrista.
Modus operandi
Anoche el ex diputado nacional y ahora director del Banco Nación, el economista Claudio Lozano, en el programa Minuto Uno, que conduce Gustavo Sylvestre por C5N, descubrió el modus operandi del grupo Vicentín para evadir y fugar divisas hacia el exterior: “El delito de Vicentín es que exportaba a Paraguay, allí y en Uruguay abrió sedes de la empresa; desde allí bajaban las barcazas como ‘productos paraguayos’, entonces no pagaba impuestos en el país y luego despachaba desde Uruguay, con lo cual se evitaba pagar impuestos Ingresos Brutos e IVA, por varios millones de dólares. En un claro acto delincuencial en contra del Estado argentino. Todo ello se debe investigar”.
Fuentes: Rosario Plus-Bolsa de Cereales de Rosario-C5N
