LA PAZ, Bolivia (Especial para EL SOL ABC-Por W. Panzeri). Si algo tiene Lionel Scaloni es la inteligencia para plantear los partidos, sabiendo qué jugador puede cumplir mejor labor en cada sector del campo de juego. Y así se vio plantear el partido ante la Selección boliviana, donde hasta se previno que Lionel Messi no juegue porque no estaba al ciento por ciento.
Y el partido merece un análisis especial, casi contestando por Scaloni, que tuvo que referenciar el “tema de la altura”, cuando en la conferencia de prensa un periodista le preguntó “sobre lo que se siente en la altura”. Por supuesto que Scaloni fue muy escueto y sólo dijo que “se siente, pero nosotros vinimos a plantear nuestro juego y lo hicimos”.
Creemos que la Selección, más allá de las alternativas propias del juego, ha logrado “imponer algo que no tiene Bolivia y varias de otras selecciones latinoamericanas –y allí es donde los técnicos defeccionan— es personalidad y volumen de juego”. Se viene viendo que la Selección ha encontrado un grado de sincronización muy pocas veces vista, porque entre quien entre todos los jugadores están mentalizados para realizar lo mismo o mejor que el compañero que reemplacen.
Otro punto para tener en cuenta
Ya yendo a lo que siempre es un gran “cuco” o lo fue, es el tema del apunamiento en la altura y donde varios dijeron que “es inhumano” jugar a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar, este grupo técnico sabe que “no es un tema que se puede pasar por alto, porque afecta”. Sino que le encontró la vuelta, “al no poner en el centro de la agenda el tema de la altura, no siendo prioridad a la hora de plantear el partido. Haciendo que los jugadores se plantearan como prioridad el cómo mantener el esquema de juego, cómo hacer rotar la pelota y eficientizar al máximo las reservas que cada uno de los jugadores podría tener”. Que todo fuera “in crescendo” de acuerdo a las necesidades del juego. Claro que eso se logra cuando tienes jugadores de la categoría de Enzo Fernández, McAllister, Rodrigo de Paul o el Fideo Di María, o el mismo Julián Álvarez, que tiene mucha fortaleza y juego, ya que corrió como el que más hasta que fue reemplazado como si no existiera la altura. Es que precisamente allí estuvo la clave: “olvidarse del tema de la altura, creyendo y desplegando lo que cada uno sabe y siente, que es manejo y ductilidad sobre la pelota”.
Mientras que los locales, “se desorientaron cuando los toques y rotación de pelota de los argentinos, les frenó de entrada el gran ímpetu con el que entraron. Y allí estuvo la falla, querer aplicar presión, pero sin manejo de la pelota, sin ductilidad de juego”. A Bolivia le falta “manejo y ductilidad con el balón”. Se vio que todo lo querían arreglar corriendo como locos y es allí que flaquearon sus fuerzas, porque enfrente encontraron juego, táctica y mucha calidad. Sólo se salva de la crítica dura el arquero Guillermo Viscarra, que tuvo excelentes atajadas y que salvó a Bolivia de perder por un abultado marcador.
Lo vengo reiterando en esta columna: el jugar el fútbol no es sólo correr o querer imponer el físico. El más claro ejemplo son jugadores como Messi, el mismo Fideo Di María, McAllister o Enzo Fernández, que no tienen grandes físicos, pero sí tienen inteligencia y han encontrado “el tiempo de juego” o “timing”, además de un estilo, que les ha permitido vencer al gran “cuco de la altura” en Bolivia.
Ficha técnica
Argentina (3): Emiliano Martínez; Nahuel Molina, Nicolás Otamendi, Cristian Romero, Nicolás Tagliáfico; Enzo Fernández, Rodrigo De Paul, Alexis McAllister; Ángel Di María, Nicolás González y Julián Álvarez.
DT: Lionel Scaloni
Bolivia (0): Guillermo Viscarra; Roberto Fernández, Jairo Quinteros, Adrián Jusino, José Sagredo; Diego Bejarano, Gabriel Villamil, Luciano Ursino; Jaime Arrascaita, Víctor Abrego y Marcelo Moreno Martins.
DT: Gustavo Costas
GOLES: a los 30’ Enzo Fernández; a los 42’ Nicolás Tagliafico; en el segundo tiempo, a los 42’ Nicolás González.
Incidencias: a los 35’ del primer tiempo fue expulsado el jugador Roberto Fernández, por artera plancha contra el defensor Cuti Romero.
Estadio: Hernando Siles – La Paz (Bolivia).
