LACALLE POU PROTEJE A PEPÍN: cómo habrán sido tan corruptos los macristas, que los únicos que tienen huidos son ellos

Nadie sabe cómo Pepín Rodríguez Simón sigue haciendo vida de rico en Uruguay, donde se mantiene fugado de la Justicia argentina. (Foto: La Voz).

MONTEVIDEO, Uruguay (Especial para EL SOL ABC-Por Seba Schwarcz *). Cómo puede ser que el monje negro del macrismo haya encontrado guarida y protección en Uruguay, además con un cinismo a prueba de balas se mueve por todo Uruguay como si fuera adalid de alguna “revolución latinoamericana”. Pero sin embargo es así. Es el Montesinos de Fujimori en la década de los 90 en Perú, quien sembró terror en las filas de familiares, amigos y contactos de los funcionarios peronistas que fueron perseguidos impunemente por el gran hacedor de la Mesa Judicial, Fabián Pepín Rodríguez Simón.

El 8 de diciembre se cumplió un año de la huida del país, de uno de los personajes más siniestros y atroces que haya tenido la democracia. Sí, a pesar de su apariencia, flacuchenta y su voz de gato empachado, era el que se reunía con los jueces y directamente les bajaba órdenes de Mauricio Macri. También lo hacía con los miembros de la Corte, vía Rosenkrantz, que es su amigo dilecto y jefe de andanzas en el grupo Clarín, cuando sabían trabajar para Magnetto. Aunque ahora indirectamente lo hagan.

En agosto pasado la CORE (Comisión de Refugiados) dio un veredicto muy directo en este país, diciendo que “Fabián Pepín Rodríguez Simón no cumple ningún requisito para quedarse en el Uruguay bajo el estatus de ‘refugiado político’ por el pedido de extradición interpuesto por la jueza Romilda Servini de Cubría por la investigación judicial por el caso de armado y sustanciación de la Mesa Judicial”. Sentencia que la Justicia local solicitaba para emitir un veredicto.

Se supo que los abogados que defienden a Pepín han apelado la sentencia de CORE ante la Corte de Justicia de Uruguay y hasta que ésta no se expida, la jueza Adriana Chamsarián, no podrá emitir un fallo definitivo con respecto a la extradición del nombrado.

De todas maneras, medios y periodistas que tienen afinidad con la ideología opositora que hoy gobierna este país, han expresado en las redes que “el presidente Lacalle Pou, por su cercanía con el macrismo, conjuntamente con varios miembros de la Corte uruguaya son miembros de la Logia Masónica Sudamericana, por lo que harán lo imposible desde ésta para que Rodríguez Simón no se lo extradite a la Argentina. Además de brindarle ayuda financiera y logística para que se mueva como un uruguayo más”.

Por ello, ahora se puede entender que el monje negro Rodríguez Simón se mueva en este país en vehículos caros y se hospede en un hotel de lujo, porque además de poseer un patrimonio millonario en la Argentina —es accionista de Clarín, La Nación, fondo de inversión HardRock y otros fondos, y tiene cuentas en paraísos fiscales—  es ayudado financieramente por los masones uruguayos.

Pero no hay fuente que no se rompa ni gota de agua que no horade la roca.

 

(*) comunicador multimedia y periodista free-lance, de origen judío, que defiende su solar patrio, porque para él, “lo primero que sirve es el suelo y techo de mis hijos. Lo demás no cuenta”. También aboga por una solución justa para el Pueblo Palestino.