Hoy como en los ochenta: El negro no puede o va por la revancha….
No sabemos si es para reír o llorar, pero 30 años después, todo sigue igual. José Alberto Furque, Hernández, Saadi, Jalil, Castillo…
En los 80 el Dr. José Furque se presentaba como candidato a gobernador haciendo fórmula con el Dr. Simón Hernández padre. por ese entonces el Dr José Guido Jalil era intendente, el Dr Ramón E. Saadi gobernador, porque le ganó a Furque luego de la payasesca reforma de la Constitución de la provincia de Catam,arca que se hizo para que los Saadi volvieran al poder después de la muerte de Vicente Leonides Saadi.
Pasaron más de 30 años. Hoy José Furque vuelve a presentarse como precandidato a gobernador. Lo acompaña en la misma fuerza Simón Hernández hijo, mientras su rival el hijo del extinto José Guido Jalil, el Lic. Raúl Jalil, y el otro Gustavo Saadi, va por la intendencia. Dando vueltas, como ahora, andaban los Brizuela, los Castillo, los Acuña…
Como una calesita infinita, Catamarca da vueltas y vueltas, pero siempre están los mismos apellidos, las mismas familias, la realeza política con las mismas promesas vacías que va cambiando de herederos y acomodando en el camino a toda la parentela, que cada vez es más y más grande.
Igual que hoy, en los 80 de la Catamarca se hablaba del nepotismo, de la cantidad de familiares ñoquis, de la enorme cantidad de empleados públicos, de la intención de instalar a Catamarca turísticamente. ¡Qué triste! Seguimos igual.
Cero renovación, cero ideas nuevas, siempre un pueblo esclavo que en vez de cadenas y grilletes tiene un contrato de empleo público, siempre pasajes de avion y vacaciones en el exterior para unos, y bolsones con alimentos para otros.
Furque, Hernández, Saadi, Jalil, Castillo… estás igual Catamarca.
¿Quién votará a Furque? Y lo van a votar al “Negro”, que tuvo su momento de gloria en el escándalo mayor de la historia catamarqueña… algunos lo van a votar. Algunos nostálgicos del Caso Morales. Capaz que el “Negro” quiere su revancha con el sadismo.
Políticamente, el GEM vino a hacerle a Juntos por el Cambio lo que el barrionuevismo le hace al Frente de Todos: sacarle votos. Quizás no gane, pero resta.
Barrionuevo y sus muchachos se van a llevar muchos o pocos votos, pero serán votos peronistas y los van a sentir Jalil-Dusso.
Furque y Simón Hernández se van a llevar votos, muchos o pocos, y serán votos radicales que lamentarán en la lista que lidera Roberto Gómez.
Al final van todos divididos. No sería raro que desde el gobierno le hagan un guiño y le den una manito a Furque. No sería raro que desde Nación hagan alguna fuerza por Barrionuevo.
El armado de listas fue pésimo de un lado y del otro, y ahora ya es tarde para arreglar las cosas. El GEM sirvió de ambulancia para la oposición, y ahora tiene más o menos la misma fuerza que la lista que armó castillo.
Para Jalil-Dusso hay mucha resistencia en el peronismo, y varios se van a encolumnar en contra.
Las cartas van quedando sobre la mesa… empieza el juego.
