FUERTE LOBBY CONTRA EL ETIQUETADO DE ALIMENTOS: Del Caño denunció a AmCham por presionar en Diputados para evitar que salga ley que proteja a la gente de la comida chatarra

Este es Manuel Aguirre, presidente de la Cámara de Comercio de EE.UU. en la Argentina, conocida como AmCham, denunciado por el diputado nacional Nicolás del Caño. (Foto: AmCham).

BUENOS AIRES (Especial-EL SOL ABC). Luego de su aprobación en el Senado de la Nación el año pasado de la Ley sobre el Etiquetado de Alimentos, la ley es cajoneada por la comisión que tiene que ver al respecto en la Cámara de Diputados de la Nación, que ha tenido varios momentos para ser tratada, pero siempre se la deja de lado. “Hay mucho lobby desde distintos sectores”, dijeron.

El diputado nacional Nicolás del Caño, del PO-FIT, denunció en su cuenta de Twitter queel representante de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en Argentina (Manuel Aguirre), que se opone a la ley de etiquetado frontal de alimentos, expuso en la Cámara de Diputados y dijo que si avanza esta ley las empresas se van a instalar en Brasil. Un chantaje de manual. #EtiquetadoClaroYA”.

 

Por qué no se quiere el etiquetado

La revista Algoritmo Mag publicó el año pasado un esclarecedor artículo de sobre por qué las empresas de alimentos no quieren que se etiqueten los mismos: “Nos engañan para intentar que consumamos esas cosas”; “Están constantemente bombardeándonos con publicidades”; “Bebidas, helados, galletitas, snacks … vemos de todo”; “Apuntan a nosotros porque somos los más vulnerables y los más fáciles de tentar”; son frases que repiten las y los adolescentes cuando les preguntamos sus opiniones sobre el marketing de alimentos y bebidas. Estos testimonios fueron recopilados en dos videos que realizamos en FIC Argentina donde, por un lado, alertamos sobre el marketing chatarra que bombardea a niños, niñas y adolescentes y, por otro lado, le solicitamos al Estado que avance con un etiquetado frontal de advertencias (octógonos negros) para poder acceder a la información sobre el contenido real de los productos que consumimos.

Así debieran mostrar todos los alimentos en sus envases si la ley sale. Allí se descubriría cómo se engaña a la gente. (Foto: Algoritmo Mag).

’’El marketing de comida chatarra impacta en las preferencias de consumo de niños, niñas y adolescentes (NNyA) y, en consecuencia, favorece el desarrollo del exceso de peso y la adopción de malos hábitos alimentarios. El bombardeo de publicidad es continuo y se sirve de distintos recursos como sorteos, premios, uso de famosos y personajes de marca (el conocido tigre en los cereales de desayuno, por ejemplo) para ser atractivo y captar la atención de NNyA. Y lo logra: “Es algo que queda en la mente… al ver muchas veces la publicidad terminas acordándote inconscientemente y después en el momento de elegir un producto u otro… te terminás quedando con el que conocés más por la publicidad”, señaló Felipe, uno de los adolescentes entrevistados.

’’La acción e intervención del Estado es clave e irremplazable para evitar esta exposición constante al marketing de productos alimenticios no saludables. En este sentido, el primer paso es avanzar con un etiquetado frontal de advertencias que identifique a los productos que contienen nutrientes críticos (sodio, azúcar, grasas, etc) en exceso para, a partir de ahí, establecer una restricción del marketing de dichos productos. Estudios nacionales, tanto de FIC Argentina como del Ministerio de Salud de la Nación, demuestran que las advertencias de octógonos negros y el perfil de nutrientes de OPS son los más adecuados y los que mejor se adaptan tanto a la normativa nacional como a las Guías Alimentarias para la Población Argentina.

’’Esta semana, en una reunión de los países que forman parte del Mercosur, se discutió sobre el etiquetado frontal de advertencias. Durante la reunión, la representante del Ministerio de Salud de la Nación, perteneciente a la Delegación Argentina, presentó la postura nacional, que no contempla los mejores estándares al momento de proteger la salud. Por ese motivo, y junto a FAGRAN, enviamos una carta al Ministerio de Salud donde mostramos nuestra preocupación ante esta postura y solicitamos la adopción de los octógonos negros y el sistema de perfil de nutrientes de OPS, que es el estándar internacionalmente más elevado a fin de proteger el derecho a la salud, la alimentación adecuada y el acceso a la información de las y los consumidores”, termina diciendo el artículo de revista Algoritmo Mag.

Finalmente, el año pasado, el columnista de Letra P, Esteban Rafaele, escribió nota al respecto, donde dijo: “La Coordinadora de Industrias Fabricantes de Alimentos (Copal), presidida por Daniel Funes de Rioja, se puso al frente del lobby para detener un proyecto que toda la industria alimenticia rechaza y no por primera vez. Detrás de ella, hay cámaras sectoriales haciendo el trabajo más fino, con el sector azucarero y su influencia en la política tucumana en particular y del Noroeste en general con un rol protagónico y los fabricantes de gaseosas, galletitas y snacks siguiéndolo minuto a minuto. Los argumentos son coincidentes: las empresas no se oponen a un etiquetado que consideran inevitable, sino al proyecto que salió del Senado con el impulso determinante –dicen en las compañías y en pasillos legislativos– de la vicepresidenta de la Nación”.