Las elecciones presidenciales de este domingo dejaron abierta la decisión de quien será el presidente para el balotaje del 24 de noviembre. Con el 98,34% de los circuitos escrutados, Daniel Martínez (Frente Amplio) obtenía el 40,62% de los votos y Luis Lacalle Pou (Partido Nacional) 29,71%.
Esta misma noche, Lacalle Pou tomó ventaja para las segunda vuelta porque tanto Ernesto Talvi (Partido Colorado) como Guido Manini Ríos (Cabildo Abierto), que se ubicaron en el tercer y cuarto puesto con el 12,8% y 11,30% respectivamente, anunciaron que le darán su apoyo para el balotaje.
Daniel Martínez celebró que el Frente Amplio haya sido la fuerza más votada y convocó al diálogo a otras fuerzas de cara al balotage. El candidato habló al país tras conocerse el boca de urna que le otorga el primer lugar con el 37%, lo que lo coloca en una posición difícil de cara a la segunda vuelta. “No hay acuerdos posibles entre cuatro paredes. Las ciudadanos y ciudadanas van a decidir quién será el que conduzca su destino”, aseguró el ex intendente de Montevideo.
El aspirante izquierdista dio las gracias a quienes confiaron en el Frente Amplio y prometió “redoblar el trabajo”. Estos resultados, ha indicado, “nos reafirma en esta lucha y seguiremos adelante”. “Asumo el desafío y se abre una nueva etapa”, ha declarado, indicando que a partir de ahora se adentra en “el camino del diálogo” para “hablar con todos los actores y saber sus puntos de vista”.
Este resultado es el peor para el Frente Amplio desde su llegada al poder hace 15 años.
En tanto Lacalle Pou dijo que “Uruguay dio una señal que hay que interpretarla de manera rápida. El mensaje es de una alternancia plural, no es de un partido solo, es de un país con responsabilidades de muchos. Ese mensaje que se expresa en todos, enseguida se expresa en porcentajes y esos son los que se expresan en el Parlamento. Y como habíamos supuesto, de un lado queda una minoría aislada, el Frente Amplio en la Cámara de Diputado y Senadores y del otro lado se abre una oportunidad. Hay tierra fértil para avanzar en un gobierno distinto, de alternacia, encabezada por el Partido Nacional”.
Visiblemente emocionado, Lacalle Pou además aseguró que quiere “pertenecer a un gobierno que no pierda la integridad internacional abrazándose a dictadores y violadores de los derechos humanos”. La declaración es una clara referencia a la “neutralidad” que el Frente Amplio dice tener sobre la crisis en Venezuela, donde le dictador Maduro reprime brutalmente a su población.
Las mediciones previas a este 27 de octubre apuntaban que Lacalle Pou ganaría en segunda vuelta si sumaba esos votos. Los opositores se han mostrado decididos durante la campaña electoral a propiciar el cambio en Uruguay, donde el Frente Amplio lleva 15 años gobernando, diez con Tabaré Vázquez y cinco con José Mujica.
Según datos de la Corte Electoral, los 7.122 centros de votación preparados para que unos 2,7 millones de ciudadanos elijan la composición del Parlamento y al presidente de Uruguay para el período 2020-2025 cerraron sus puertas con un 89% de participación.