BUENOS AIRES (Especial-EL SOL ABC). Se cumplieron tres años hace poco del “otro robo encubierto”, que fue el 23 de septiembre de 2017, cuando Federico Sturzenegger –en ese momento presidente del Banco Central de la República Argentina— entregó las reservas en oro al Banco de Inglaterra, so pretexto de “ganar intereses para las reservas argentinas del BCRA”.
Hasta ahora nadie informó “cuánto se ganó hasta el día de hoy y dónde va a parar ese dinero, si es que el Banco de Inglaterra paga en término y de cómo esos recursos metalíferos están a resguardo con algún seguro bancario o de bienes muebles, para de esa forma puedan regresar a las arcas del BCRA”. Es una tarea que le toca al ahora presidente del Central, Miguel Ángel Pesce, conjuntamente con los vicepresidentes Sergio Adrián Woyecheszen y Jorge Eduardo Carrera, informar al pueblo argentino “la situación de esos bienes patrimoniales de todo el país”.
El que puso sobre aviso es el profesor Cano en el portal “La Voz de los Barrios”, donde escribió que “el 23 de septiembre de 2017, por orden de Mauricio Macri, el Banco Central envió a Inglaterra 462 millones de dólares en lingotes de oro.
’’Se tratan de 11.000 mil kilos del metal precioso que formaban parte de las reservas del Banco Central y tuvo como destino la ciudad de Londres.
’’La estrategia de Macri fue migrar parte de las reservas monetarias de oro, con el fin de ‘alquilarlos’ en los mercados internacionales y ‘reinvertirlos en operaciones más rentables’, denominadas carry trade. Operación que se realizó a través de Federico Sturzenegger, presidente del Banco Central de la gestion macrista entre 11 de diciembre de 2015 y el 14 de junio de 2018.
’’Los lingotes de oro fueron comprados durante la gestión del Gobierno kirchnerista. Ese capital es puramente argentino y pertenece al Estado nacional, pero nunca más volvieron al país”, termina publicando el medio aludido.
Muchos temen que esos recursos no regresen al país, fruto de algún “embargo por algún retraso en pago solamente de intereses por la cuantiosa deuda tomada inescrupulosamente por Mauricio Macri y sus ministros, donde casualmente ni Clarín ni La Nación criticaron abiertamente este tipo de operación que pone en riesgo los bienes de todos los argentinos”.
