BUENOS AIRES (Especial-EL SOL ABC). Lo que hicieron ayer los diputados del PRO, con Ritondo a la cabeza, es de “aplastamiento” de la política. Siguen en la dinámica de no hacerse cargo “de los tremendos desatinos políticos manejando la administración del Estado”. Y haciendo analogía de una frase de Perón, “se les dio la administración del Estado a unos imberbes”.
Y así ayer mostraron, cuando el Presidente dijo que “voy a pedir a la Justicia que investigue todo el endeudamiento realizado por el anterior gobierno”, el peor rostro de unos políticos que no tienen un norte ni tampoco un esquema de coherencia, para presentarse como alternativa para 2023.
De acuerdo a lo que refirieron varios periodistas que dieron cobertura especial a la primera asamblea legislativa del año y marco que les sirve a los presidentes para realizar un pormenorizado informe sobre su gestión y de lo que propondrá para el resto del año, los diputados de Cambiemos, especialmente los del PRO ya tenían un plan de retirarse “si el Presidente nombraba a Macri o cualquier funcionario del anterior gobierno”. En ese trabajo estuvo el diputado Ritondo, ladero de María Eugenia Vidal, de quien dijeron que “desde la mañana temprano había dado indicios sobre lo que harían, si en caso el Presidente los nombraban, cuando tuiteó a sus compañeros mensajes subliminales”.
Uno de los colegas, luego de la retirada en masa de los diputados del PRO, dijo muy acertadamente: “Cuando uno tiene la cola sucia, enoja que lo pongan en evidencia”.
Por supuesto, desde el lado opositor, salieron a reclamar “más diálogo”, que cuando ellos estuvieron en el gobierno “primero te encarcelaban y luego te armaban la causa”.
El más exaltado fue el diputado Wolff que dijo que “enoja tanta mentira”.
