El anacronismo de la Corona inglesa muestra símbolos perimidos y asfixiantes para sus miembros

Enrique y Meghan se aburrieron del protocolo cerrado de una corona, que muestra muchas aristas grises, casi negras en la historia mundial. (Foto: Reuters).

LONDRES, Inglaterra (Especial por Phil Noble para REUTERS). La corona inglesa es como una gran empresa, que le da de comer a mucha gente en Inglaterra. Primero, por lo ingresos que recauda el turismo y fisco británicos, que se sobrepasan los 1.000 millones de euros anuales. Y esta es una de las verdaderas razones para que no se elimine esa institución. Pero existe otra oculta, que tras los ropajes de la reina y de todos sus palacios hay sectas ocultas satánicas que van tras del poder sobre el mundo. Allí son contados con los dedos de las dos manos los adscriptos —que pocos saben y conocen—  que se reúnen la reina Isabel, que es una férrea defensora de este estatus oculto y por ello permanece en la corona. Desconfían de Carlos y por eso no es nombrado sucesor.

Por qué se van Enrique y Meghan

Porque si bien en un principio fue la pareja muy bien recibida por la prensa que vive a costillas de Buckingham, hoy es maltratada y también porque “El Colorado” fue ninguneado por la reina Isabel en la fiestas de fin de año, dándole prioridad a Guillermo y su esposa y al príncipe Carlos.

Todo este protocolo de rencillas ocultas ha comenzado a mostrarse y es asfixiante para aquellos que como los duques Sussex, tal el título nobiliario de Enrique y Meghan, que quieren hacer una vida normal de familia, lejos de “los protocolos, lejos de los chismeríos de palacio, lejos de la cámaras, de los flashes, y hasta lejos de la pomposidad y del dinero fácil”. Quieren hacer una vida normal.

Comunicado

El Palacio de Buckingham comunicó que el príncipe Enrique y su esposa, Meghan Markle, ya no usarán los títulos de ‘alteza real’ ni recibirán fondos públicos después de que se llegara a un acuerdo sobre su renuncia como miembros de la familia real.

Asimismo, la pareja devolverá los 2,4 millones de libras esterlinas (3,1 millones de dólares) de los contribuyentes que se gastaron en la renovación de su hogar cerca del castillo de Windsor.

El pasado miércoles, el príncipe Enrique y su esposa Meghan Markle anunciaron en su cuenta oficial de Instagram que planean dar un paso atrás como miembros de la familia real británica con el fin de “forjarse un nuevo papel” en la institución de forma progresiva y “ser independientes desde el punto de vista financiero”. En la misma línea, señalaron que su decisión les permitirá centrarse en su hijo y en la creación de una nueva entidad caritativa.

Isabel II afirmó que la familia real apoya el deseo de Meghan y Enrique de “crear una nueva vida como una joven familia” y anunció “un período de transición durante el cual los Sussex pasarán tiempo en Canadá y el Reino Unido”.